sábado, 18 de febrero de 2012

La tarde desde la ladera



Vistas desde Cabo Tiñoso
Mi viejo siempre dice que "a el no le gusta viajar, porque si no conoces Murcia no conoces el mundo", ahí es nada "el maestro". Muchas veces creo que en su sabiduría se equivoca, otras creo que en mi prepotentes 33 años me queda mucho por aprender.

Un atardecer mágico, el mediterraneo tranquilo como la balsa que es, cuando es una balsa. El sol rojo como el infierno, apasionado y eterno. La historia en forma de fortificación de estilo ecléctico de 1929, el cañón apuntando al infinito y las sombras alargadas del presente.

Es verdad, a veces la impecable Patagonia, el sol de media noche de Noruega, la majestuosa Roma o el exotismo de África palidecen ante un ocaso invernal a orillas del mediterraneo.  El mar donde nació la historia. Si no conoces tu tierra  no conoces el mundo. 

 



   " Ay...
si un día para mi mal
viene a buscarme la parca.
Empujad al mar mi barca
con un levante otoñal

y dejad que el temporal
desguace sus alas blancas.

Y a mí enterradme sin duelo
entre la playa y el cielo...

En la ladera de un monte,
más alto que el horizonte.
Quiero tener buena vista.

Mi cuerpo será camino,
le daré verde a los pinos
y amarillo a la genista...

Cerca del mar. Porque yo
nací en el Mediterráneo... "

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